Descripción
Visita el segundo palacio más grande de la ciudad, basado en el palacio mudéjar del Alcázar sevillano pero con importantes atisbos y reformas renacentistas traídos de Italia por los herederos de los fundadores, los Enríquez de Ribera.
Sorpréndete de la colección arqueológica de la planta baja o la pictórica de la superior, siendo actualmente propiedad de la Casa Ducal de Medinaceli.
Sabías que?
Se dice que en este palacio se conservan algunas reliquias, algunas tan interesantes como las cenizas del gallo que cantó cuando Pedro negó a Cristo.
