7 curiosidades de Murillo
Murillo es uno de nuestros pintores más universalmente conocidos, que vivió la práctica totalidad de su vida en Sevilla, con muchas curiosidades, algunas de las cuales podremos conocer en este artículo
Murillo es uno de nuestros pintores más universalmente conocidos, que vivió la práctica totalidad de su vida en Sevilla, con muchas curiosidades, algunas de las cuales podremos conocer en este artículo
Quizás Murillo sea conocido por muchos como el “pintor de las Inmaculadas” o por su gran cantidad de pinturas religiosas. Pero bien es cierto que también cultivó otras temáticas, convirtiéndose en un pintor muy polifacético, como se puede observar en la exposición Murillo, IV Centenario.
En el siguiente artículo vamos a presentaros otras curiosidades de San Luis de los Franceses, para que sepáis más de esta fantástica Iglesia.
En el siguiente artículo vamos a presentaros otras curiosidades de San Luis de los Franceses, para que sepáis más de esta fantástica Iglesia.
El retablo mayor de la Iglesia de San Luis de los Franceses, realizado por el sin par genio de Duque Cornejo, sobrino de Luisa Roldán, “La Roldana”, a la cual se le atribuye la ejecución de la mascarilla de Nuestra Señora de la Esperanza “Macarena” ; y nieto de Pedro Roldán, al cual debemos, entre otras obras en Sevilla, el relieve del traslado al sepulcro de Nuestro Señor Jesucristo que podemos admirar en la Parroquia de San Jorge, junto al Hospital de la Santa Caridad, tiene algunas particularidades que lo hace único entre los retablos con los que Sevilla lleva sus Iglesias.
San Luis de los Franceses es una de las obras barrocas más impresionantes del arte europeo. Construida entre los años 1699 a 1732, por deseo de sus promotores, la Compañía de Jesús, en ella intervinieron los más afamados artistas del momento en Sevilla.
La Iglesia de San Luis de los Franceses, erigida por la Compañía de Jesús a partir del año 1699, tras una donación recibida por la orden, dispone de un programa iconográfico realizado al gusto e los Jesuitas con el que intentaban, por un lado, impactar en el fiel que acudiese al templo y por otro inculcar en el novicio las ideas de sacrificio, esfuerzo y entrega a Dios y a la orden.
Desde que hace años comenzasen las obras de rehabilitación del Templo de San Luis de los Franceses, en la antigua calle real, calle que servia a los monarcas españoles para entrar en la ciudad, y que hoy lleva el nombre de San Luis en honor al templo, se han sucedido una serie de fenómenos de difícil explicación que han dado lugar a una leyenda negra acerca de esta iglesia de San Luis de los Franceses.
El edificio es original debido a su planta, trazada como cruz griega, en contraposición al resto de iglesias del momento que eran todas con planta de cruz latina.
La iglesia del antiguo noviciado de los jesuitas se reabre siendo el mejor exponente del esplendor de este estilo artístico en Sevilla